La Exclusiva se multiplica en verano

Por Antxón Benito

Los pueblos se transforman en verano. Las calles vacías se llenan de color y alegría. Surgen cientos de sonidos que superan con creces al inevitable y solitario eco invernal. La transformación estival de los pueblos es tal que “los lloros y gritos de los niños sustituyen al silencio de los entierros”, en palabras de José Antonio, cronista oficioso de Serón de Nágima.

Una diferencia abismal que hace que iniciativas como La Exclusiva tengan que multiplicar los esfuerzos para llegar a muchos más habitantes en más rutas. Porque “La Exclusiva de invierno trabaja para las personas que viven en el pueblo todo el año, principalmente mayores. Mientras que La Exclusiva de verano trabaja también para las mismas personas, pero, además, para los miles de veraneantes que vienen a pasar el verano: hijos, nietos, hermanos,… ya no sólo personas tan mayores. Si hasta tenemos que esquivar las bicis de los niños”, manifiesta Vicky Tortosa, responsable junto a Hugo Núñez, de La Exclusiva.

Así, los 500 clientes habituales durante todo el año en las 4 rutas abiertas en Soria que les suelen llevar unas 8 horas diarias cada una se convierten en más de 2.000 clientes, 6 rutas y casi 14 horas al día de dedicación.

Porque, como dice Luisa delante de su marido Anselmo, “durante el año sólo somos dos pero en agosto nos multiplicamos y las 12 personas que vivimos en la misma casa necesitamos más comida que recibimos gracias a La Exclusiva”.

Pero no sólo eso. El cambio pasa también por el tipo de alimentación. Y, por encima de todo, por el hecho de que en verano se disparan las entregas de electrodomésticos y otros muebles, así como las reformas. “Por ejemplo, en lo que llevamos de verano hemos entregado más de 100 frigoríficos”, puntualiza Hugo.

Algo que se debe a la presencia de los vástagos que aprovechan agosto para hacer las reformas necesarias. Por eso este mes es el más importante para que más usuarios conozcan los servicios de La Exclusiva. Todo ello aprovechando que, como indica Vicky, “nos nutrimos del boca oreja. Nuestros clientes son nuestros principales prescriptores”.

Permitir que cada cual viva donde quiera vivir

Con todo, el objetivo de La Exclusiva es el mismo en cualquier época del año: Revertir el proceso de despoblación en las zonas rurales escasamente pobladas a través de un modelo de logística que permite vivir a cada persona donde, de verdad, quiere vivir.

Porque éste es uno de los factores que realmente marcan el devenir de los entornos rurales. Un pueblo sin tienda lo tiene muy complicado para atraer y fijar población. De hecho, suele ocurrir lo contrario. Se vacían con mayor rapidez cuando pierden este servicio tan esencial.

De ahí que el dato de que La Exclusiva llega a la práctica totalidad de pueblos sorianos sin tienda, unos 580, se puede considerar un enorme éxito en pro de la repoblación de una de las zonas más afectadas del país.

Con un eslogan tan sencillo como contundente, “La tienda de los pueblos sin tienda”, La Exclusiva ha conseguido hacer más por la repoblación de Soria que muchas iniciativas surgidas desde las diferentes administraciones. Y ahora se han empeñado en seguir el trabajo en otros lugares. El primero en la provincia de Burgos, donde ya se han abierto varias rutas.

La movilidad es un problema muy grave que nos preocupa muchísimo. No puede ser que por vivir en el medio rural, haya que pagar 70 euros de taxi para llegar al médico o a la farmacia”, denuncia con vehemencia Vicky. “Hay que seguir peleando porque la administración invierta en innovación social y confíe en las nuevas iniciativas que están surgiendo y que han creado formas de resolver problemas sociales de una manera innovadora”.

El futuro pasa por escuchar las necesidades de los usuarios

Aquí ya no queda nadie. Si no fuera por vosotros, no sé qué haríamos” es la frase que más escuchan Hugo y Vicky cuando llevan sus pedidos a Amparo, Bene, José Antonio o Luisa. Pero en verano vuelven los que viven fuera y los pueblos recuperan su mejor versión. Esa perspectiva bucólica que hace que muchos se replanteen en verano por qué no vivir en el pueblo el resto del año.

La libertad y la paz que se respira, el no tener prisa todo el rato, la vida en comunidad”, son aspectos que destaca Vicky en sus habituales visitas a los pueblos sorianos. “A mi me sorprende que se hable de nuevos modelos de vida en comunidad en Europa, cuando existen desde siempre”.

Invierno, otoño, primavera o verano. Da igual la estación del año en la que nos encontremos cuando se trata de hablar de futuro. Porque “aunque preferimos mirar a corto plazo, en unos años imagino a La Exclusiva en muchos más sitios y con muchos más servicios”, adelanta Vicky antes de asegurar que “hay mucho que hacer aún en los lugares donde estamos trabajando en este momento”.

Por eso, Vicky y Hugo seguirán empeñados en mantener la comunicación con sus clientes a través del canal que sea. “El contacto es sobre todo por teléfono y presencial pero con los más jóvenes funciona muy bien Whatsapp. Y también tenemos email, pero casi nadie dispone de internet en casa”, un problema que en muchos lugares se extiende a la telefonía. De ahí que La Exclusiva tenga que contar con móviles de varias operadoras dependiendo de la ruta diaria a cubrir. Una nueva barrera que logran derribar para lograr que quien haya decidido vivir en un entorno rural pueda hacerlo con la misma calidad y los mismos servicios que en una ciudad.

La Exclusiva: una revolución

Por Roberto Ortega

Que una pareja de personas mayores que vive en un pueblo perdido de la mano de Dios, un pueblecito sin tienda, en el que habitan media docena de personas en invierno, tenga acceso a los mismos productos de alimentación o cualquier otro servicio que en un entorno urbano y, además, con los mismos precios que en la capital… eso es una auténtica revolución, sino un milagro (laico).

Eso es justamente lo que hace La Exclusiva, una empresa social cuyo eslogan es ‘La Tienda de los Pueblos sin Tienda’. La Exclusiva ha conseguido llegar desde que comenzó a funcionar hace tres años y medio a todos los pueblos de Soria, a esas localidades que no tienen ningún servicio en kilómetros y kilómetros a la redonda.

La despoblación se mueve en un círculo vicioso: no hay servicios porque no hay gente y no hay gente porque no hay servicios. La Exclusiva ayuda a romper ese círculo al cubrir esas necesidades básicas, que van desde comprar la comida de la semana hasta un frigorífico, cambiar la bañera por ducha (algo muy importante cuando hablamos de personas mayores) o, incluso, servicios de abogados.

Recién nacida la empresa, yo escribí un artículo en ‘Heraldo de Soria’, medio en el que colaboraba (ahora lo hago en ‘Heraldo-Diario de Soria’), en el que definí a La Exclusiva (ya hace todo un lustro) como “la mejor idea que ha surgido en Soria en el último medio siglo” y me preguntaba cómo sería ahora la provincia si la empresa hubiera empezado a funcionar hace 30 años, cuando los pueblos empezaron a quedarse sin su tienda, sin su bar, sin su coche de línea…

El impacto social de La Exclusiva es enorme porque no es un mero reparto a domicilio. La Exclusiva también alivia la soledad de sus clientes, es el único contacto semanal de muchos de ellos con el mundo exterior, sabe de sus dolencias y de sus necesidades, de sus penas y de sus alegrías. Muchos hijos llaman a La Exclusiva para cerciorarse de que sus padres en el pueblo están bien, y al revés, si La Exclusiva detecta algo raro se lo comunica a esos hijos.

Frenar la despoblación es menos fácil que algunos de los trabajos de Hércules, pero todavía es más complicado si no se hace nada, que ha sido la tónica en las últimas décadas.

En este sentido, la sociedad civil se está moviendo. La Exclusiva nació en El Hueco, que es un centro de fomento del emprendimiento social radicado en Soria y que ha sido seleccionado por la OCDE como una de las mejores instituciones europeas en esta materia. El Hueco prepara para noviembre una gran feria para la repoblación de Soria, que ofrecerá un completo catálogo de todo lo que ofrece Soria para quien quiera replantearse su vida, alejarse de los grandes núcleos urbanos y empezar en otro lugar.

Sergio del Molino, cuyo libro ‘La España vacía’ ha sido una ayuda inestimable para que la opinión pública, y el propio Estado, comience a ver la despoblación como un problema, es muy pesimista cuando se le pregunta si tiene solución.

El futuro será el juez inapelable, pero, por lo menos, La Exclusiva habrá hecho su trabajo para que, por lo menos el presente, y ojalá el porvenir, sea lo mejor posible.